Comunicado del Comité Nacional de ANNAHJ ADDIMOCRATI (Vía Democrática)
El Comité Nacional de Annahj Addimocrati (Vía Democrática) en su reunión ordinaria, celebrada el pasado 5 de abril bajo el lema “Todos y todas contra la OTAN y la represión majzeniana”, emitió el siguiente comunicado después de haber hecho una lectura analítica de la situación actual que fue marcada por unos acontecimientos cuyos grandes rasgos se quedaron reflejados en los ámbitos nacional e internacional:
En el ámbito nacional:
La salvaje represión por parte de las autoridades marroquíes de la concentración convocada por la Alianza de la Izquierda Radical (Vía Democrática, Solidaridad por una Alternativa Socialista, Opción de la Izquierda Democrática Basista) para expresar su más enérgica repulsa a la colaboración militar y en materia de “seguridad” de Marruecos con la OTAN, a la presencia militar extranjera en el país, al pago de las facturas de la crisis capitalista por parte de los trabajadores/as, al embargo criminal impuesto sobre el pueblo palestino, a la normalización de relaciones con la entidad sionista y a la impunidad de sus responsables políticos y militares por los crímenes de guerra cometidos contra los pueblos palestino y libanés.
La protesta popular frente al parlamento en Rabat y la injustificable carga policial contra los manifestantes, ha dejado en descubierto el verdadero rostro de este régimen y su naturaleza autoritaria, opresora y pro-imperialista cuyo único cometido es la aplicación de las anti-populares directrices políticas, económicas y militares de los imperialismos (la ruptura de relaciones con Venezuela e Irán después de la invasión sionista a Gaza).
La pomposa preparación de las elecciones comunales por parte del régimen y de las fuerzas partícipes de las llamadas instituciones “democráticas”, frente a la más absoluta indiferencia de la población que de antemano se abstuvo de registrarse en el censo electoral.
La creación y patrocinio de nuevos partidos satélites para seguir dominando y controlando el escenario político.
El control y monopolio del ámbito religioso a través de cofradías y congregaciones religiosas. Lo cual se contradice con las supuestas pretensiones “modernistas” y “democráticas” del régimen actual.
El crecimiento de la represión contra las fuerzas opositoras y militantes (los estudiantes universitarios de Fez, los militantes de la Asociación marroquí de diplomados en paro, los trabajadores/as saharauís, los chiís, la prensa y los periodistas, etc.). En definitiva, contra todo aquel que se atreve a manifestar su disconformidad con la situación actual o a manifestarse públicamente.
La falta de voluntad e iniciativas para resolver la cuestión del Sahara.
El ofrecimiento de todo tipo de ayudas a las clases dominantes y el fracaso de las opciones económicas basadas en la especulación inmobiliaria y el turismo, y dirigidas en exclusiva a los ricos y a las empresas multicoloniales.
La puesta en marcha de inversiones multimillonarias en infraestructuras de dudosa efectividad que sólo responden a los intereses de las empresas multicoloniales (el caso del puerto mediterráneo de Tánger y el tren de alta velocidad), en vez de cumplir con las necesidades básicas del pueblo.
La carestía de la vida, el aumento de la pobreza y el vertiginoso deterioro de la situación social: despidos masivos de los trabajadores/as, privatización de la sanidad, la enseñanza y los bienes públicos, etc.
La transformación de muchas regiones del país en zonas ruinosas a causa de las fuertes precipitaciones y nevadas en los últimos meses, lo que pone al descubierto la demagogia del discurso oficial sobre “el desarrollo”.
En el ámbito internacional:
El sistema capitalista sigue agonizando en su crisis pese a la oferta de importantes ayudas económicas estatales a la banca y a numerosas instituciones financieras. Lo que explica el recrudecimiento de las contradicciones entre los imperialismos, el ascenso imparable del desempleo, la pobreza y la xenofobia respecto a los emigrantes, notablemente, en su forma legislativa mediante el endurecimiento de las “leyes de extranjería”.
El aumento de la represión como respuesta a las protestas populares y a la resistencia de los pueblos a saldar las facturas de la crisis capitalista.
El crecimiento de las luchas populares en diversos países del mundo (la multitudinaria manifestación del 29 de enero en Francia, las protestas populares en Guadalupe y su expansión a las islas de Martinica, Reunión y Mauricio; la manifestación contra la OTAN y la cumbre de los G20, etc.…).
La llegada al poder del gobierno de extrema derecha de Natanyahu. Que es sobradamente conocido por su afán de exterminio del pueblo palestino.
Es por todo ello que el Comité Nacional de Vía Democrática quiere:
– Denunciar y condenar la criminal represión llevada a cabo contra los manifestantes en la concentración del sábado 04 de abril.
– Hacer un llamamiento a las fuerzas democráticas para que sigan intensificando su lucha en pro de los derechos humanos, el respeto de las libertades democráticas, la liberación de todos los presos políticos y el cumplimiento de las reivindicaciones sociales y sindicales.
– Reiterar nuestro llamamiento al boicot activo de las próximas elecciones comunales y la lucha por una democracia verdadera basada en una constitución democrática.
– Llamar a las fuerzas militantes para reactivar los comités de solidaridad con los pueblos palestino e iraquí. Los comités de la lucha contra el imperialismo y el sionismo y las coordinadoras para la lucha contra la carestía de la vida.
– Invitar a todas/os los militantes para que se preparen para la celebración del Primero de mayo en un ambiente de lucha y combate.
Independencia y Socialismo 