Nota oficial del
Colectivo Unidad Comunista
Nuestro colectivo se formó a partir de la voluntad de algunos militantes, la mayoría tras romper con el PSTU a finales de los noventa, para resistir el proceso de institucionalización y la capitulación ante el régimen democrático-burgués de las organizaciones de izquierda en Brasil. Combinada con esta decisión, estaba la intención de luchar por el reagrupamiento de los revolucionarios, necesidad vital ante la embestida del capitalismo desde el desmantelamiento de la Unión Soviética.
Teniendo en cuenta las condiciones adversas, las debilidades de un puñado de militantes aislados, podemos decir que su trayectoria rindió algunos frutos. Nuestro colectivo no se limita a las discusiones internas, mantuvo una permanente acción militante, publicó folletos, boletines de noticias, e incluso un periódico regular, El Proletario. Además orientó a sus miembros en el sentido de estructurarse y organizarse junto a nuestra clase, animando sus actividades sindicales y culturales.
La conciencia de que nuestro camino no debe ser la construcción de otra secta de izquierdas, atada a un mesías «del marxismo», detentador de todas las respuestas, nos llevó desde el principio a reconocernos como militantes marxistas y, por lo tanto, comunistas. Reconocemos y partimos de las elaboraciones y las contribuciones de nuestros líderes históricos: Marx, Engels, Lenin, Trotsky, Gramsci y Rosa Luxemburgo. Procurando escapar, correctamente, de los exclusivismos sectarios y reduccionistas.
Manteniendo la coherencia con esa línea de pensamiento, buscamos establecer acuerdos y relaciones políticas con otras organizaciones de la izquierda comunista. Éramos parte del movimiento que más tarde daría lugar a la creación del PSOL, donde defendimos la creación de un frente de izquierdas, en base de un programa mínimo, abierto a las organizaciones y partidos legalizados, donde estos mantendrían su independencia organizativa y política, propuesta que fue derrotada ante la intención, mayoritaria en aquel movimiento, de constituirse como partido meramente electoral en el marco del régimen burgués, hecho que nos llevó al apartamiento definitivo.
A pesar de este revés, la UC no se retrajo sino que, por el contrario, continuó su trabajo militante. Se orientó entonces a un combate permanente contra los desvíos sectarios y ultraizquierdistas, adoptando, dentro del movimiento obrero, una propuesta de Frente Único de todos aquellos que se colocan en el campo de la lucha contra la ofensiva capitalista.
Es a partir de este período que, en las luchas de los trabajadores, en las elecciones y en las campañas antiimperialistas, donde tuvimos alguna participación aquí en Río de Janeiro, verificamos que nuestras posiciones estaban muy próximas a las defendidas por el PCB. A partir de este reconocimiento, procuramos establecer relaciones políticas con este partido, en consonancia con nuestro objetivo estratégico de la reunificación de los revolucionarios. Esta aproximación culminó con la invitación a participar de su XIV Congreso.
Nuestra comprensión de que el PCB demostró en este XIV Congreso tener el potencial para convertirse en el aglutinador de la izquierda comunista brasileña. En los debates que lo precedieron, observamos que las posiciones de los militantes y simpatizantes tenían libre acceso a los medios de comunicación del partido, permitiendo a todos a conocer no sólo las tesis preparadas por la dirección, sino al conjunto de aportaciones provenientes de las más diversas instancias partidarias. Los tesis pusieron en debate un rico análisis de la situación internacional y nacional, avanzando también en el examen del derrocamiento del modelo burocrático en la URSS y de las deformaciones estalinistas producidas allí.
Las conclusiones del XIV Congreso indican correctamente la caracterización del capitalismo, en cuanto sistema mundial, como el principal enemigo del proletariado mundial y, consecuentemente, ponen el internacionalismo proletario al orden del día. A nivel nacional, define el carácter socialista de la revolución brasileña, en el entendimiento de que el capitalismo está plenamente consolidada en Brasil, conducido por un bloque burgués unido de forma umbilical al imperialismo.
El PT en el gobierno cumple un papel nefasto, ha demostrado ser la quinta columna de la burguesía en el seno del proletariado, reforzado el dominio del capital monopolista en alianza con el imperialismo, desmovilizando y contribuyendo a hacer retroceder la conciencia de clase de los trabajadores.
Como estrategia de combate a ese bloque burgués y sus aliados, el Congreso plantea la necesidad de un Bloque Revolucionario del Proletariado para aglutinar a las fuerzas políticas y sociales antiimperialistas y anticapitalistas, en la búsqueda de la emancipación de los trabajadores. Este Bloque tiene que ir más allá de meras coaliciones electorales, debiendo concretarse en las más diversas trincheras de la lucha de clases.
Para nosotros, desde Unidad Comunista, estos son los temas fundamentales. Si estamos de acuerdo en ellas, creemos que sería un gran error para mantenernos divididos en función de particularidades tácticas o locales. Por estas razones, coherentes con lo que siempre hemos defendido, hemos llegado a la decisión de disolver UC y adherirnos, como soldados de la revolución, al Partido Comunista Brasileño.
¡Viva la Unidad de los Comunistas!
¡Viva la revolución socialista!
¡Viva el Partido Comunista Brasileño!
Río de Janeiro, marzo 2010
BIENVENIDOS CAMARADAS DEL COLECTIVO UNIDAD COMUNISTA
Ivan Pinheiro
Secretario General del PCB
El PCB se enorgullece de recibir en sus filas a los camaradas que componen el Colectivo Unidad Comunista, con el que en los últimos años hemos venido manteniendo un diálogo respetuoso, pasando revista nuestros puntos de vista sobre los caminos de la revolución brasileña.
Este hecho histórico se da en el momento en que el PCB ha llamado la atención de los verdaderos comunistas de Brasil, de acuerdo con los cambios que vienen operando en su línea política y su concepción del partido, rompiendo con las ilusiones reformistas y señalando la necesidad de luchar más allá de la institucionalidad burguesa.
Con el mismo orgullo, hemos recibido a camaradas que vienen de otras organizaciones y colectivos, con las culturas y referencias teóricas y prácticas diferentes. No hemos hecho públicos estos reclutamientos individuales en respeto a las organizaciones de dónde proceden. En el caso de Unidad Comunista, por tratarse de un colectivo ahora disuelto y por haber hecho pública su adhesión consensuada, por decisión soberana de sus ex miembros, queremos hacer algunas consideraciones.
Lo más significativo de esta integración es la posibilidad, la actualidad y la riqueza de la convivencia fraterna dentro de una misma organización revolucionaria de camaradas que tienen diferentes lecturas del colapso del proceso de construcción del socialismo en la Unión en Soviética y otros países, sobre todo de Europa Oriental. El PCB, que tiene como referencia fundamental el legado de Marx, Engels y Lenin, tiene en cuenta también las contribuciones, los aciertos y errores de otros revolucionarios, incluso los que suscitan fuertes discusiones apasionadas y, a veces, maniqueas.
El XIV Congreso del PCB, celebrado hace unos meses –para discutir el balance y las perspectivas del socialismo– tuvo la sabiduría de no aprobar un texto obligatorio para sus miembros, sino un documento que, siendo resultado de todo lo que existe en nuestro partido sobre el tema, sirva de referencia para la continuación de este debate necesario, que requiere una discusión más profunda y desapasionada, sobre todo porque, desde el punto de vista histórico, es muy reciente.
El centralismo democrático en un partido revolucionario no significa que todo el mundo tiene la misma opinión sobre la historia del movimiento comunista, nacional e internacional. E, incluso, sobre el rumbo de la revolución brasileña. El centralismo democrático, calle de doble vía, es la unidad de acción y la disciplina partidaria en torno a las resoluciones de los órganos partidarios y de los fundamentos del Partido.
En la actualidad, lo que une a los comunistas es el empeño en la reconstrucción revolucionaria del PCB y la resolución aprobada en el Congreso, que trata de la ESTRATEGIA Y LA TÁCTICA DE LA REVOLUCIÓN BRASILEÑA, que será ampliamente difundida en los próximos días.
Sean bienvenidos los comunistas brasileños a un partido que no tiene ninguna ventaja que ofrecer a nadie, ni es una marca electoral, y que pretende crecer con calidad revolucionaria, organización leninista, disciplina consciente e integración en el movimiento de masas.
Río de Janeiro, marzo 2010