Las urgencias electorales han acelerado un proceso que se venía larvando hace tiempo: derribar la dirección nacional de Izquierda Unida Canaria, compuesta mayoritariamente por comunistas y el ala izquierda de la coalición. Al calor del pacto por su cuenta de IU Tenerife con escindidos del PSOE y con Nueva Canarias-PIL, se desplazan a Canarias dos “pesos pesados” de la dirección federal de IU: Miguel Reneses, Secretario de Organización, y Enrique Santiago, Secretario de Refundación y amigo íntimo del también abogado laboralista Joaquín Sagaseta.
La negativa de la dirección canaria a tragar con un pacto con la derecha más corrupta de las Islas, ha servido de pretexto para que desde Madrid se envíen los tanques a Canarias. Este domingo, ambos prebostes metropolitanos participaron en una asamblea irregular, supuestamente de miembros de IU Gran Canaria, en una asociación de vecinos de Jinámar dirigida por Lolo Rodríguez, quién presidía la mesa junto a aquellos dos.
Tanto Reneses como Santiago dieron su bendición al pacto suscrito por IU Tenerife, y señalaron que “hay que celebrar una asamblea de militantes y construir una nueva Izquierda Unida en Gran Canaria abierta a la sociedad”. Curiosamente, Lolo Rodríguez, hombre de Joaquín Sagaseta, asistió también el pasado jueves a la asamblea en la que el grupo del abogado grancanario y sus simpatizantes decidieron presentarse a las elecciones como “Frente Amplio”.
A los enviados metropolitanos parece que no les preocupa esta doble militancia en una plataforma que, en principio, va a competir electoralmente con IU.
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