Los cubanos podrán comprar y vender sus viviendas entre particulares a partir del próximo jueves 10 de noviembre, cuando entren en vigor las nuevas leyes en materia habitacional, que reconocen la compraventa, permuta, donación y adjudicación de viviendas entre personas naturales cubanas con domicilio en el país y extranjeros residentes permanentes en la Isla.
La Gaceta Oficial de la República de Cuba dará a conocer la Ley 288 y varias resoluciones complementarias con las precisiones del caso, aunque fuentes oficiales ya adelantaron que no se podrá ser propietario de más de un inmueble como residencia permanente y otro de descanso. El objetivo de la disposición es eliminar prohibiciones y flexibilizar trámites relacionados con la transmisión de la propiedad de la vivienda.
Hasta el momento para realizar cualquier transacción de una casa entre particulares, conocidas en Cuba como las permutas, se necesitaba la autorización de la Dirección Municipal de la Vivienda. Esta autorización se elimina junto a otras disposiciones y ahora tan solo se requerirá la inscripción del inmueble en el Registro de Propiedad, un acta notarial de la transacción y el pago de un impuesto.
El gran número de trámites burocráticos para disponer legalmente de una casa fomentaron diversos casos de corrupción en un país que hasta el 2010 un déficit reconocido de unas 600.000 casas, en parte por los destrozos que causaron tres huracanes en 2008.
Según datos oficiales, más del 50% de las construcciones en la isla está en mal estado y 8,5 de cada 10 edificios necesitan reparaciones, a lo que se suman incumplimientos en los planes estatales de construcción. Precisamente uno de los objetivos de la nueva normativa es «contribuir a la solución del problema habitacional» en la Isla.
En cuanto a la compraventa, se establece que la operación se realizará ante notario por el precio que libremente acuerden las partes y el comprador debe acreditar, entre otros detalles, la existencia del dinero en una sucursal bancaria y presentar una declaración que garantice que la cantidad se ha obtenido lícitamente. La forma de pago será a través de un cheque emitido por el banco donde previamente el comprador habrá ingresado el dinero.
Respecto a las otras formas de transmisión de la propiedad, las nuevas disposiciones, que entrarán en vigor el 10 de noviembre, flexibilizan las posibilidades de permuta y clarifican las situaciones por herencias. Las operaciones de transmisión de propiedad de vivienda estarán sujetas a impuestos. En el caso de la compraventa será de un 4% sobre el precio del inmueble.
El gobierno revolucionario mantendrá limitaciones sobre el traspaso de inmuebles en determinadas zonas del país de «alta significación para el turismo».